Por Rommel García Beristain
México, DF., Hace una semana que arribé a la gran capital y no podía faltar a mi recorrido matutino por las inmediaciones del hotel en el que me hospedo, muy cercano al otrora Parque del Seguro Social, ese que fue el templo de los Diablos Rojos del México y en su momento de los Tigres, el otro equipo capitalino, en la época de oro de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB).
Pero de aquella época de oro, que se dio indudablemente antes de la aparición de la Asociación Nacional de Beisbolistas (Anabe), aquella agrupación que intentó emanciparse, sólo quedan recuerdos y del Parque del Seguro Social, ni sus ruinas, pues ahí ahora se desarrolla la construcción de un centro comercial (Mall), que borrará hasta el recuerdo del beisbol.
No pude sino lamentar, no el hecho de que ya no exista el Parque del Seguro Social, sino el poco impulso que el beisbol ha tenido en la gran capital y si me apresuran a decir, en el resto del país, la prueba más reciente los mil obstáculos que han puesto para que exista pelota en Tijuana, la esquina donde inicia Latinoamérica.
Cierto es que los Diablos Rojos y los Potros (si es que prosigue el plan original), iniciarán en marzo próximo la temporada 2005 de la LMB, pero nada que ver con aquella clase de pelota que se jugó el siglo pasado, cuando peloteros grandesligas se daban su vuelta por el circuito veraniego.
Como tijuanense que soy, me ha tocado vivir en esencia todo lo referente al impulso y obstáculos en torno al beisbol tijuanense, el más reciente el pleito entre empresarios de la localidad por la tenencia de la franquicia beisbolera y la intromisión de las autoridades estatales, en favor de algunos y en contra de otros, con el beisbol como pretexto.
En fin, que es posible que los Potros de Tijuana sucedan a los Toros que jugaron la campaña anterior en la LMB, pero todo depende de los empresarios, quienes esgrimieron como argumento para oponerse, un amparo federal en cuanto a los derechos sobre el estadio del Cerro Colorado en la colonia Capistrano y la recurrencia a las autoridades de ese nivel para hacerlo valer.
De los anabistas que hay en Tijuana, habrá tiempo para platicar más adelante.
martes, enero 25, 2005
domingo, enero 16, 2005
Carlos Yeme, ejemplo a seguir
!Qué bueno que están con nosotros! es más que una frase, en realidad es el grito de batalla y la identidad de uno de los periodistas deportivos más reconocidos de la región Tijuana-San Diego, el conductor televisivo Carlos Yeme Villarruel.
A Carlos lo conocí cuando recién llegó de su natal Guadalajara, cuando apenas había rebasado la veintena de años y traía el ímpetu propio de su maestro, el gran Enrique Bermúdez de la Serna, con quien vivió sus primeros años en el periodismo.
Con ese ímpetu, Carlos formó parte de aquel movimiento por hacer del periodismo deportivo una actividad más profesional y pronto encabezó el grupo de periodistas que dieron paso a la Asociación de Periodistas Deportivos de Tijuana (APDT).
De hecho, Carlos ha sido uno de esos profesionales de la crónica que marcan la pauta y entre sus colegas mantiene la admiración y el objetivo de llegar a ser como es él.
Claro está, el hecho de ser un periodista polémico no gusta a muchos, pues en varios de los casos, su forma de decir las cosas le ha acarreado antipatías, especialmente de aquellos que se sienten aludidos.
Carlos ha mostrado su profesionalismo en el desempeño que ha tenido durante los más de 12 años que tiene como periodista en Tijuana y la gente del deporte lo tiene muy identificado.
Lo mismo ha incurrido en el periodismo televisivo que en el radiofónico, además de que por algún tiempo formó parte del grupo de editorialistas del semanario Cicuta.
Uno de sus principales alumnos es su hermano Anuar, quien lo empezó a acompañar en el programa radiofónico Frecuencia Deportiva y además en las transmisiones de los juegos de postemporada del beisbol de Grandes Ligas.
Carlos tiene aun mucho que dar al periodismo deportivo y las generaciones venideras seguirán viendo en él un ejemplo a seguir.
A Carlos lo conocí cuando recién llegó de su natal Guadalajara, cuando apenas había rebasado la veintena de años y traía el ímpetu propio de su maestro, el gran Enrique Bermúdez de la Serna, con quien vivió sus primeros años en el periodismo.
Con ese ímpetu, Carlos formó parte de aquel movimiento por hacer del periodismo deportivo una actividad más profesional y pronto encabezó el grupo de periodistas que dieron paso a la Asociación de Periodistas Deportivos de Tijuana (APDT).
De hecho, Carlos ha sido uno de esos profesionales de la crónica que marcan la pauta y entre sus colegas mantiene la admiración y el objetivo de llegar a ser como es él.
Claro está, el hecho de ser un periodista polémico no gusta a muchos, pues en varios de los casos, su forma de decir las cosas le ha acarreado antipatías, especialmente de aquellos que se sienten aludidos.
Carlos ha mostrado su profesionalismo en el desempeño que ha tenido durante los más de 12 años que tiene como periodista en Tijuana y la gente del deporte lo tiene muy identificado.
Lo mismo ha incurrido en el periodismo televisivo que en el radiofónico, además de que por algún tiempo formó parte del grupo de editorialistas del semanario Cicuta.
Uno de sus principales alumnos es su hermano Anuar, quien lo empezó a acompañar en el programa radiofónico Frecuencia Deportiva y además en las transmisiones de los juegos de postemporada del beisbol de Grandes Ligas.
Carlos tiene aun mucho que dar al periodismo deportivo y las generaciones venideras seguirán viendo en él un ejemplo a seguir.
sábado, enero 15, 2005
El hilo delgado del beisbol
Por Rommel García Beristain
Si Alberto Uribe Maytorena, presidente de Promotora de Espectáculos Sociedad Anónima (Proesa), pensó que ponerse con Sansón a las patadas iba a resultar fácil, se equivocó y rotúndamente, pues no sólo ha perdido de manera eventual los derechos sobre el estadio del Cerro Colorado, sino también la posibilidad de hacer beisbol en esta ciudad.
Y no es que se quiera hacer un juicio de Uribe y sus procedimientos, pero realmente hace un año tuvo como aliados al alcalde Jesús González Reyes y el gobernador Eugenio Elorduy para lograr, aunque fuera momentáneamente, una franquicia beisbolera.
Hace un año, con el gobernador y el alcalde de su lado, Uribe se enfrentó a Juan Manuel Ley y los Mansur, propietarios de equipos en la Liga Mexicana de Beisbol y en el caso del empresario sinaloense de tiendas de autoservicio, en la Liga Mexicana del Pacífico.
Hace un año, Uribe logró lo que por mucho tiempo intentó el grupo Humberto Castañeda, pero siempre encontró grandes obstáculos y poco apoyo gubernamental y cuando creyó que su proyecto prosperaría, fue cuando el respaldose destinó a Alberto, el empresario gasolinero.
Lo más triste de todo esto es el espectáculo que se da al mundo beisbolero, pues el entre que Elorduy Walther se avienta contra Uribe, lo coloca en una situación difícil, más que nada, porque fue al mismo empresario al que respaldó un año antes para lograr la franquicia.
Es más, a tal grado lo respaldó, que todavía en el último semestre del año pasado, se enfrentó abiertamente y hasta con amenaza de un boicot a Juan Manuel Ley y sus empresas, porque supestamente el sinaloense era el más fuerte opositor al proyecto de beisbol en Tijuana.
Aun queda pendiente saber si Uribe Maytorena logrará que el amparo que dice poseer prospere y de ser así, a ver si le regresan el estadio.
Pero independientemente de que esto pudiera suceder, el beisbol se convierte en la distracción favorita de los tijuanenses, no como deporte, sino como asunto político-polémico. Apuestas.
Si Alberto Uribe Maytorena, presidente de Promotora de Espectáculos Sociedad Anónima (Proesa), pensó que ponerse con Sansón a las patadas iba a resultar fácil, se equivocó y rotúndamente, pues no sólo ha perdido de manera eventual los derechos sobre el estadio del Cerro Colorado, sino también la posibilidad de hacer beisbol en esta ciudad.
Y no es que se quiera hacer un juicio de Uribe y sus procedimientos, pero realmente hace un año tuvo como aliados al alcalde Jesús González Reyes y el gobernador Eugenio Elorduy para lograr, aunque fuera momentáneamente, una franquicia beisbolera.
Hace un año, con el gobernador y el alcalde de su lado, Uribe se enfrentó a Juan Manuel Ley y los Mansur, propietarios de equipos en la Liga Mexicana de Beisbol y en el caso del empresario sinaloense de tiendas de autoservicio, en la Liga Mexicana del Pacífico.
Hace un año, Uribe logró lo que por mucho tiempo intentó el grupo Humberto Castañeda, pero siempre encontró grandes obstáculos y poco apoyo gubernamental y cuando creyó que su proyecto prosperaría, fue cuando el respaldose destinó a Alberto, el empresario gasolinero.
Lo más triste de todo esto es el espectáculo que se da al mundo beisbolero, pues el entre que Elorduy Walther se avienta contra Uribe, lo coloca en una situación difícil, más que nada, porque fue al mismo empresario al que respaldó un año antes para lograr la franquicia.
Es más, a tal grado lo respaldó, que todavía en el último semestre del año pasado, se enfrentó abiertamente y hasta con amenaza de un boicot a Juan Manuel Ley y sus empresas, porque supestamente el sinaloense era el más fuerte opositor al proyecto de beisbol en Tijuana.
Aun queda pendiente saber si Uribe Maytorena logrará que el amparo que dice poseer prospere y de ser así, a ver si le regresan el estadio.
Pero independientemente de que esto pudiera suceder, el beisbol se convierte en la distracción favorita de los tijuanenses, no como deporte, sino como asunto político-polémico. Apuestas.
miércoles, enero 12, 2005
Estadio de beisbol: manzana de la discordia
Por Rommel García Beristain
Vaya lío. La directiva de los Potros de Tijuana, el equipo de beisbol que eventualmente participará en la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) se reporta listo para competir, excepto por un detallito: hasta el miércoles, el gobierno del estado no le había entregado el documento que acreditaba a la novena tijuanense como el ente administrador del inmueble.
El lío estriba precisamente en que la LMB no dará su autorización a la novena tijuanense si ésta no cuenta con un estadio, una situación que se complica pues hace poco más de un año el gobierno del estado entregó en comodato ese inmueble a Promotora de Espectáculos (Proesa), que en ese tiempo administraba al equipo Toros, antecesor de Potros en el circuito varaniego.
Y es que todo esto tiene fondo, pues hace un año, a fin de lograr que la LMB autorizara la participación de una novena en ese circuito, ni el gobienro del estado ni el municipal escatimaron esfuerzos por lograrlo y entre los acuerdos tomados se incluyó entregar a Proesa la administración del inmueble bajo la condición de comodato.
El término de comodato a Proesa se extiende por tres años, esto es, el que ya concluyó dos más, todo para que esa empresa administrara el inmueble con la condición de que ahí jugara la novena tijuanense, con lo que Jesés González Reyes, en ese entonces alcalde, cumplía una promesa hecha durante su campaña proselitista dos años antes, de que moriría en la raya, pero Tijuana contaría con equipo y un estadio de beisbol.
Proesa cumnplió su parte, pero como su presidente, el empresario Alberto Uribe Maytorena no es santo de la devosición de algunos presidentes de equipos de la LMB, más pronto que ya buscaron la manera de botarlo y lo hicieron.
Pero Uribe no quiso quedarse con los brazos cruzados, así que tan pronto como la LMB la bateó, con el aval de González Reyes contactó una nueva liga, y pronto halló cobijo en la Golden Baseball League, recién creada en Estados Unidos con equipos de California y Arizona.
Así que con la misma prontitud hizo el anuncio en una conferencia de prensa, pero más tardó en darlo a conocer, que el gobernador Eugenio Elorduy Walther en desconocerlo y referir que el único equipo que reconocía y el único que jugaría en el estadio del Cerro Colorado, sería Potros.
Así las cosa, a estas altura, el sábado 15 de enerpo, la LIga Mexicana deberá tener en sus manos el documento que acredite a Potros como el tenedor del estadio, pues si no lo hace, el sueño de que el beisbol retorne a Tijuana quedará en una pesadilla.
Vaya lío. La directiva de los Potros de Tijuana, el equipo de beisbol que eventualmente participará en la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) se reporta listo para competir, excepto por un detallito: hasta el miércoles, el gobierno del estado no le había entregado el documento que acreditaba a la novena tijuanense como el ente administrador del inmueble.
El lío estriba precisamente en que la LMB no dará su autorización a la novena tijuanense si ésta no cuenta con un estadio, una situación que se complica pues hace poco más de un año el gobierno del estado entregó en comodato ese inmueble a Promotora de Espectáculos (Proesa), que en ese tiempo administraba al equipo Toros, antecesor de Potros en el circuito varaniego.
Y es que todo esto tiene fondo, pues hace un año, a fin de lograr que la LMB autorizara la participación de una novena en ese circuito, ni el gobienro del estado ni el municipal escatimaron esfuerzos por lograrlo y entre los acuerdos tomados se incluyó entregar a Proesa la administración del inmueble bajo la condición de comodato.
El término de comodato a Proesa se extiende por tres años, esto es, el que ya concluyó dos más, todo para que esa empresa administrara el inmueble con la condición de que ahí jugara la novena tijuanense, con lo que Jesés González Reyes, en ese entonces alcalde, cumplía una promesa hecha durante su campaña proselitista dos años antes, de que moriría en la raya, pero Tijuana contaría con equipo y un estadio de beisbol.
Proesa cumnplió su parte, pero como su presidente, el empresario Alberto Uribe Maytorena no es santo de la devosición de algunos presidentes de equipos de la LMB, más pronto que ya buscaron la manera de botarlo y lo hicieron.
Pero Uribe no quiso quedarse con los brazos cruzados, así que tan pronto como la LMB la bateó, con el aval de González Reyes contactó una nueva liga, y pronto halló cobijo en la Golden Baseball League, recién creada en Estados Unidos con equipos de California y Arizona.
Así que con la misma prontitud hizo el anuncio en una conferencia de prensa, pero más tardó en darlo a conocer, que el gobernador Eugenio Elorduy Walther en desconocerlo y referir que el único equipo que reconocía y el único que jugaría en el estadio del Cerro Colorado, sería Potros.
Así las cosa, a estas altura, el sábado 15 de enerpo, la LIga Mexicana deberá tener en sus manos el documento que acredite a Potros como el tenedor del estadio, pues si no lo hace, el sueño de que el beisbol retorne a Tijuana quedará en una pesadilla.
lunes, enero 10, 2005
Preparan evento de marcha en Tijuana
Por tercer año consecutivo, Tijuana será sede de un evento internacional de marcha, en esta ocasión denominado 2005 IAAF Race Walking Challenge, que ofrecerá boletos para el Campeonato Mundial de la especialidad.
El comité organizador informó que esta competencia es la primera de un circuito de seis paradas que ofrece a los marchistas del mundo la oportunidad de ganar puntos y la posibilidad de completar una buena bolsa al término del serial.
El 2005 IAAF Race Walking Challenge está previsto para efectuarse en esta ciudad el 19 y 20 de marzo próximos, cuando se espera que los mejores exponentes del orbe concurran como lo han hecho en los dos años anteriores.
Al iniciar los trabajos para esta competencia, el comité organizador informó que tienen segura la participación del ecuatoriano Jefferson Pérez y el polaco Robert Korzeniowski, quienes compitieron el año pasado en esta ciudad.
El comité organizador informó que esta competencia es la primera de un circuito de seis paradas que ofrece a los marchistas del mundo la oportunidad de ganar puntos y la posibilidad de completar una buena bolsa al término del serial.
El 2005 IAAF Race Walking Challenge está previsto para efectuarse en esta ciudad el 19 y 20 de marzo próximos, cuando se espera que los mejores exponentes del orbe concurran como lo han hecho en los dos años anteriores.
Al iniciar los trabajos para esta competencia, el comité organizador informó que tienen segura la participación del ecuatoriano Jefferson Pérez y el polaco Robert Korzeniowski, quienes compitieron el año pasado en esta ciudad.
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